La primera vez que escuché hablar sobre el conflicto Palestino-Israelí, fue con 16 años. Me tocó hacer un trabajo para la asignatura de Historia, donde la profesora nos mandó hacer un trabajo a cada uno sobre un conflicto a nivel mundial. Éramos 3 clases de veintipico y la profesora encontró conflictos para asignar a cada alumno. Esto sucedió en 2003, pero no me cabe duda de que si un profesor de Historia se propusiera lo mismo a día de hoy, encontraba decenas y decenas de conflictos nacionales e internacionales. Cuando llegué a casa le expuse a mi padre el tema que me había tocado y le pregunté que qué pasaba. Su respuesta rápida ya por aquel entonces fue «Pues que unos se defienden con piedras y los otros les lanzan bombas pagadas por los más ricos».
A día de hoy tengo 38 años y la ocupación y genocidio han llegado a tales extremos que están en boca de todos, siendo a día de hoy de los conflictos más graves del planeta. Vivimos demasiado asustados (y es normal) como para rebelarnos como colectivo contra cualquier opresión. El castigo de los que manejan el poder siempre es demasiado duro y esto se puede ver desde guerras que arrasan con la humanidad, hasta los conflictos más personales, más de barrio, más de tu vecina MariCarmen, que no le importa a casi nadie si puede pagar o no el alquiler, si luego la desahucian y se cuelga. Como activista, he tenido muchos frentes abiertos y todos duelen, desgarran y me importan por igual. Como le digo a mi hija, no tengo la respuesta a todas las preguntas, ni el acceso a todas las soluciones, pero como bruja, sí creo que cualquier acto bueno, de bondad, tiene una onda expansiva que eleva la vibración del mundo. Si tan sólo todos los millones que somos en el mundo, desobedeciéramos con amor un poquito, cada día, y le dijéramos todos los días a alguien que lo queremos, no me cabe duda de que el efecto mariposa haría un anillo en este planeta tan potencialmente bello, que hemos convertido en un peligro.
No reconozco el estado de Israel.
Cada Israelí es un colono que debería dispersarse.
Viva Palestina Libre.
Y que todos los responsables y criminales de guerra paguen.