Me imagino siendo una ninfa en un bosque, puro charlar y cepillarme el pelo con mis amigas, puro flotar en el agua y mecer a las nutrias. Bailar con el viento y la luna. Si apareces y me miras, si apareces y me hablas, te odiaré.
Esta foto está hecha al lado de una de las cascadas de Mortain, en Francia. En aquellos bosques había una antigua capilla abandonada que habría rehabilitado para quedarme a vivir allí.