Tengo un mal sabor de boca de la foto anterior, la de ayer. Normalmente sé por qué hago mis fotos, en otras ocasiones es una impulsividad y fotografío y edito de forma inconsciente, como si algo me susurrara al oído. Os dejo este autorretrato, en el que puedo pintarme y desdibujarme, porque la Fotografía es la única que me deja construir la realidad que yo quiero. La que se ve, la que no se ve, la que existe y no existe.